Además de ser un placer, el desayuno es una de las comidas más importantes del día y la que menos engorda, ya que se tiene todo el día por delante para quemarlo. El cuerpo necesita de esta energía para empezar a funcionar y poner en marcha el metabolismo.
Sabiendo combinar los alimentos podrán tomarse desayunos deliciosos, abundantes y nutritivos.
Si bien es una costumbre bastante arragaida, tomar solamente un café al levantarse y aguantar sin comer nada hasta el mediodía es un mal hábito alimenticio que influye negativamente sobre la salud. Estar tantas horas sin comer hará tener menos energías y seguramente caerá en la tentación de comer alimentos pocos recomendables cuando se tenga un ataque de hambre a media mañana.
Si no se desayuna correctamente el organismo desciende el metabolismo del organismo, ya que al no recibir comida se protege a sí mismo ahorrando energía y acumulando grasas.