Consejos para cuidar tus oídos y evitar problemas auditivos

¿Te imaginas la vida sin música, buenas conversaciones, el sonido del mar o la risa de tus amigos? Muchas veces no valoramos suficientemente las cosas hasta que no las perdemos, como es el caso la salud de nuestro cuerpo, en general, o de alguno de nuestros sentidos como la vista o el oído, en particular.

Por ello, antes de hablarte de cómo cuidar tus oídos para evitar problemas auditivos te invitamos a ver esta infografía de los #SONIDOSDELAVIDA con datos realmente interesantes sobre la salud auditiva:

GAES_INFOGRAFIA

¿Cómo cuidar tus oídos?

  • Hacer las revisiones recomendadas en función de la edad (a partir de los 50 años es importante hacerse una primera revisión) o antecedentes familiares, e incluso en niños pequeños cuando detectamos retrasos en el aprendizaje. Asimismo, para cualquier molestia visita a tu médico en vez de optar por la automedicación.
  • Evitar ruidos intensos. Generalmente estamos sometidos a un ruido continuo de ambiente (mayor o menor en función de si vivimos en lugares con más o menos gente) y esto nos hace subir el volumen más de lo recomendable para oír la televisión, la música, el teléfono y distintos dispositivos simultáneamente. ¿Sabías que según el INE un 30% de las viviendas en España sufren problemas de contaminación acústica?
  • Los reproductores de música no deben de superar el 60% de la potencia ni usarse más de una hora al día.
  • Si tu trabajo te somete a ruidos intensos utiliza la protección recomendada.
  • Los resfriados e infecciones pueden llevarte a cierta pérdida auditiva, tenlo en cuenta y controla el problema.
  • La humedad en los oídos puede producirnos otitis así que sécatelos bien al salir de la ducha e intenta usar tapones para la piscina.
  • Los bastoncitos para los oídos u otros objetos pueden dañar la membrana interior así que no los uses. Limpia tus oídos al salir de la ducha con una toalla o papel eliminando el exceso de humedad que está a tu alcance.
  • Durante los viajes no bajes la ventanilla del coche pues puede producirte otitis ni tampoco duermas en el despegue y/o aterrizaje en avión. Asimismo, cuando sufras de cambios de presión dolorosos puedes tratar de solucionarlos bostezando, masticando chicle o echando el aire de la respiración por la nariz.
  • Durante el verano también hemos de tener cuidado con el aire acondicionado demasiado frío que también nos puede provocar otitis.

Lo cierto es que, si lo pensamos bien, la salud del oído, seguramente por tradición, es algo que generalmente no nos preocupa hasta que no pasemos cierta edad y/o nos demos cuenta realmente de una pérdida, generalmente difícil de percibir dado que suele ser gradual. Sin embargo, más allá de la pérdida auditiva, nuestros oídos pueden sufrir muchas otras afecciones desconocidas como los acúfenos de los que podéis leer más en la web de GAES: http://www.gaes.es/conoce-tu-oido/problemas-auditivos/acufenos

En definitiva, al igual que vamos al oculista con cierta frecuencia pues cada vez tenemos más pantallas a nuestro alrededor y nos pasamos más y más horas delante de ellas, es importante que visitemos a especialistas en audición para revisar el estado de nuestros oídos cada vez sometidos a más estrés sonoro que viene del tráfico, la televisión, el móvil y el resto de dispositivos con los que interactuamos simultáneamente.

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