Las vacaciones son un período especial para las personas por una buena cantidad de razones, entre las cuales destaca el hecho de que pueden prestarle más atención a su cuerpo, sobre todo si están en verano y se ven obligadas a exhibirlo, además de que tienen más tiempo libre para aprovechar las actividades que les permitan mejorarlos. Es lo que algunos científicos denominan como “síndrome del corazón”.
En este sentido, aunque el ejercicio físico es recomendado en cualquier parte del año, incluso en vacaciones, no podemos dejar de señalarte que existen una serie de riesgos que se corren cuando sólo llevamos adelante actividad física en los períodos de relajación, por lo que conviene tener en cuenta algunas precauciones que pueden serte muy útiles.
Es así que, si quieres comenzar un entrenamiento en vacaciones, te recomendamos que apuestes en primer término por dosis bajas de esfuerzo, y las vayas aumentando progresivamente. Además, no descuides en ningún momento la hidratación, ya que es fundamental para que el cuerpo se recupere a tiempo, y es importante que nunca esperes a tener sed para tomar líquidos.
De la misma forma, no podemos dejar de recomendarte que apuestes siempre por practicar deportes o ejercicios físicos en las horas más frescas del día, además de que lo hagas con toda la vestimenta y el calzado adecuado para las actividades, que de más está decirlo, nunca conviene que las lleves a cabo hasta al menos dos horas antes de comer.
Además, evita el consumo brusco y elevado de alcohol, además de las grandes comilonas, sobre todo si no estás acostumbrado a ese tipo de ingestas. Incluso, si de verdad piensas realizar un esfuerzo físico importante, te recomendamos que apuestes por realizarte los estudios cardiovasculares correspondientes. Finalmente, utiliza al verano como el punto de inicio para todos estos cambios de tu vida, lo que te hará realmente bien.
