Se manifiesta con una sensación de pesadez estomacal, acompañada de somnolencia y eructos.
Las causas que pueden provocar este estado pueden ser nerviosas u orgánicas. El aparato digestivo recibe muchas influencias del sistema nervioso central y las personas tensas hacen su descarga nerviosa a nivel digestivo. Generalmente los que padecen digestión lenta son personas ansiosas y tragan aire cuando comen muy rápido o hablan cuando comen o mastican con la boca abierta. Aunque también existe la posibilidad de tener alguna patología gástricas, vesicular o pancreática, que deben descartarse a través de una consulta médica a un especialista.
Si el problema tiene causas nerviosas se aconseja un régimen compuesto por alimentos de fácil digestibilidad, que abandonen rápido el estómago. Se aconseja comer:
- Almidones: arroz, polenta, fideos, sémola y avena extra fina.
- Carnes magras: preferentemente cortes tiernos.
- Cereales sin fibra y frutas sin cáscara: manzana, pera, durazno, ciruelas y damascos.