Las discusiones con la pareja afectan nuestra vida, la tranquilidad mental, influye en nuestro organismo emocional.
Motivos como proteger demasiado a nuestro hijos, ponerlos ante nuestra pareja preferiblemente, el duro trabajo del día recargarlo en nuestra pareja, el mal humor… nuestro compañero@ de fatigas no tiene ninguna culpa de nuestros problemas. Nuestra pareja está para todo lo contrario, para dialogar con ella y prestarle o pedirle ayuda en los problemas. El diálogo ayuda a la tranquilidad emocional.
Las reacciones psicológicas de las emociones afectan a nuestro organismo directamente y por lo tanto a nuestra salud.
Otra opción es que si un problema persiste y la solución no la podemos encontrar en casa, es olvidarnos de este, pues su solución solo hará torturarnos para no conseguir nada, solo perjudicarnos uno al otro.
La noche es el momento adecuado para que los adultos puedan parlamentar, ya que los niños intuyen todos los problemas de sus padres y esto les afecta directamente tanto a ellos como a nosotros.
Un orden en el diálogo es fundamental, no perder los nervios, respetar el turno de palabra, no responder hasta que el otro haya terminado de exponer sus opiniones… esto convierte el diálogo en casi una terapia beneficiosa para los afectos del organismo.
Las reacciones físicas no son nada satisfactorias, se puede perder el control y llegar al maltrato físico, algo muy común hoy en día que puede terminar en tragedia.
Cuida tu relación de pareja, dialoga, escucha… es un cuidado especial que todos necesitamos y que nos ayuda a vivir más relajadamente.
Fuente: queo