Ahora que estamos en pleno verano es inevitable buscar cualquier forma para refrescarnos, y más allá de bañarnos en la playa o piscina, tomar cantidad incalculable de agua y refrescos, hay otra práctica también muy saludable y habitual: tomar algunas frutas especiales de verano.
Estas frutas pueden ser por ejemplo, el melón, la sandía, las fresas… muy buenas y refrescantes, pero como ya te hemos comentado, si tu ideal es mantener la forma y tener mejor cuerpo este verano, ten mucho cuidado con ellas. La pregunta es, ¿por qué?
Que todas estas frutas estén tan dulces no es ninguna casualidad, y es que aunque son en mayormente agua, también contienen grandes cantidades de azúcar, lo que se traduce en que si abusas, te vas a llevar algún que otro kilo extra de más. ¿Conclusión?
La conclusión ideal que podemos sacar es que si te gustan mucho estas frutas, las tomes de manera contenida y nunca al libre albedrío. No te excedas, y disfrutarás tanto de su sabor como de una buena figura.