En alguien que padece de la enfermedad de las arterias periféricas (PAD), depósitos de sustancias grasas se acumulan y restringen el flujo sanguíneo en las arterias de los brazos, piernas, pies, estómago, riñones o pelvis.Los síntomas más comunes son calambres o dolor en los muslos, pantorrillas, o caderas, los cuales se producen al hacer actividad física (caminar o subir escaleras). Sin embargo, en el 75 por ciento de las personas (y especialmente en las mujeres) que padecen de PAD, no presentan síntoma alguno.
Los síntomas generalmente se disipan con reposo. Las personas que padecen esta enfermedad suelen tener acumulaciones de grasa en las arterias del corazón y cerebro, situación que eleva sustancialmente el riesgo de morir a causa de ataque al corazón o ataque cerebral.
Aunque muchas personas cuando experimentan dolor en las piernas se lo atribuyen al envejecimiento o artritis, se recomienda consultar al médico o profesional quien determinará de donde proviene y podrá asistirlo con algunas recomendaciones o medicación apropiada para cada caso en particular.