El cansancio ocular es una consecuencia de trabajar intensamente con mala iluminación o de una mala visión. Los síntomas son, dolor de cabeza detrás de los ojos o en la frente, cansancio en los ojos y una cierta inflamación.
Para ello aplicaremos una compresa de infusión de flores de caléndula, o bien un saquito humedecido de infusión de escaramujo.
Con homeopatía tomaremos, euprhasia, que además de aliviar el cansancio dará un brillo en la mirada. Y si tenemos los ojos picantes, inflamados y calientes, tomaremos Ruta grav.
De la despensa nos pondremos unos saquitos de té frio colocados sobre los ojos, o simplemente unas rodajas de pepino.