La natación es uno de los deportes más recomendados para las personas que quieren mejorar su condición física sin perder demasiado tiempo, y también sin tener que someterse a aburridas rutinas de gimnasio. Por ello, a continuación vamos a recordarte algunos de los principales beneficios que ofrece esta actividad física, para convencerte de una vez por todas de que la desarrolles.
Primero que nada, debes tener en cuenta que una de las grandes ventajas de la natación está relacionada directamente con que este ejercicio puede ser llevado adelante de muchas formas diferentes y adaptarse a las necesidades individuales de cada persona, y de hecho, existen cursos para bebés, mujeres embarazadas, personas mayores, y demás.
Incluso, en los últimos tiempos se ha hecho especial hincapié en la realización de rutinas que afecten directamente desviaciones propias de la columna vertebral, que lamentablemente son cada vez más comunes, como por ejemplo hiperlordósis, hipersifósis, escoliósis, hernias discales, o también enfermedades cardíacas, circulatorias, artrosis, artritis y obesidad, entre otras.
Luego, otros de los beneficios de la natación que debemos tener en cuenta, más a nivel general, tienen que ver con que aporta una gran resistencia pulmonar, además de que permite una estimulación superior de la circulación sanguínea, y ayuda a mantener una presión arterial más estable, ya sea que la tuya tienda a subir o bajar por demás.
De la misma forma, ayuda al desarrollo de tres de cada cuatro músculos de nuestro cuerpo, sin dejar de considerar que mejora la postura corporal por fuera de la piscina, que desarrolla la flexibilidad de todo el cuerpo, que alivia las principales tensiones y nudos que podamos tener, y sobre todo, que ayuda a mejorar estados de ansiedad y aliviar síntomas de depresión, sin dejar de olvidar que favorece la autoestima, y relaja los músculos que suelen estar contraídos por la actividad diaria, en cualquier trabajo que realicemos.
