Es la eliminación de gases producidos en el intestino grueso. El gas de las flatulencias está compuesto de anhídrido carbónico, hidrógeno y metano, producidos por la acción de bacterias instestinales.
Para evitar este tipo de molestias, hay que reducir el consumo de hidratos de carbono ricos en almidón como las papas, féculas, soja, fibras y porotos, tratando de incorporar fibra soluble que protegerá al intestino del ataque bacteriano.