Aunque parezca una obviedad, es bueno recordar que no es recomendable compartir los cepillos dentales. El intercambio de fluidos corporales que esto promovería, aumenta el riesgo de contraer infecciones para quienes los compartan. Esta es una consideración particularmente importante para las personas con sistemas inmunes comprometidos o con enfermedades infecciosas.
- Después del cepillado, enjuague su cepillo dental cuidadosamente con agua corriente para remover la pasta dental y los detritos, déjelo secar al aire libre, y guárdelos en posición vertical con las cerdas hacia arriba. Si varios cepillos comparten el mismo cepillero, no permita que haya contacto entre ellos.
- No es necesario remojar los cepillos dentales en soluciones desinfectantes o enjuagues bucales. En realidad esta práctica puede provocar la contaminación entre cepillos si la solución se utiliza durante un período largo o si varios usuarios la comparten. Tampoco es necesario utilizar lavavajillas, dispositivos de microondas o rayos ultravioletas para desinfectarlos. Estas medidas pueden dañarlos.