Ya se ha hablado en opensportlife de lo poco aconsejable que es ingerir alcohol en cantidades grandes. Hace poco ha contado Gustavo que provoca deshidratación; por eso, logicamente, si una noche nos hemos pasado con el alcohol… bebe agua antes de acostarte. De esta manera, al día siguiente tu cuerpo no estará tan sediento y no estarás tan molesto físicamente.
Si no has cenado bien, come algo aunque te cueste. El estómago se asienta mejor. Nunca leche ya que es fuerte y si estás delicado por una ingesta de alcohol se puede cortar la digestión y sentir nauseas. Lo mejor es el té, que asienta y espabila, y un poco de pan con jamón cocido y queso, si quieres salado o un poco de mermelada si te gusta más el dulce.
Aunque estés cansado, no está nada mal caminar un poco para despejar la cabeza. Una buena ducha relajante y una vueltecita a la manzana.
Hidratarte bien pero no en exceso, porque la sensación de sed es exagerada cuando bebes mucho el día anterior. Bebe zumo de naranja. La vitamina C te restaurará por dentro y te aportará energía.
Las comidas tienen que ser suaves, para proteger la mucosa del estómago. Un arroz blanco, por ejemplo, es ideal. Los yogures, que son muy suaves y van estupendos también.
Si necesitas un analgésico para el dolor de cabeza, tómalo con mucha agua y después de haber comido algo.
Como anécdota, decir que los antiguos romanos tomaban infusiones de manzanilla y té.
