El calor, la presión y el movimiento ablandan el cerumen ayudando a limpiar de manera natural los poros de impurezas, manteniendo así la higiene de la zona del tímpano. La vela, tiene que ser especial, con ingredientes 100% orgánicos y de cera de abejas 100% natural. No tiene que producir humo. Su llama es controlada, constante e inofensiva para la piel. Y su ceniza ni tiene temperatura, ni supone un peligro.