Piénsalo bien, si no tienes tiempo por la mañana para calentar leche, preparate un desayuno en condiciones o comer algo nutritivo y sabroso al mismo tiempo, entonces haz una parada y échale un vistazo a lo que te mostramos a continuación, porque te aseguramos que no tiene desperdicio.
Se trata de buscar un desayuno que entre bien por el paladar y las papilas gustativas, que no sea pesado y que desde luego sea lo más nutritivo posible para ayudarte a comenzar bien el día. Ten a mano lo siguiente:
- Avena
- Dos yogures
- Un plátano (opcional)
- Miel
Simplemente mezcla en un cazo de batidora los dos yogures con la avena (la que consideres necesaria, dará un resultado más o menos pastoso), un plátano para dar más sabor y energía rápida, y miel para endulzar en gran medida el producto final. Bátelo todo, y el resultado lo tendrás en poco menos de un minuto.
Un desayuno de este calibre te aporta más de 400 calorías y lo puedes considerar una de las mejores opciones a nivel global. Poco hay mejor, y desde luego no es plato de mal gusto.