La fiebre del trekking

En los últimos años, el trekking se ha popularizado enormemente en España. No nos estamos refiriendo a una práctica consistente en revisar viejos capítulos de Star Trek, con el Capitán Kirk y Spock comandando los designios de la Enterprise. El senderismo representa una manera de hacer deporte, de manera adaptada a las necesidades de cada uno, mientras disfrutamos al máximo de la naturaleza y el aire libre.

El origen de la fiebre

Fue en los años 70 del siglo pasado cuando se produjo la introducción del senderismo como disciplina más o menos reglada en España, con la aparición de las primeras federaciones nacionales y provinciales.

¿Dónde se practica?

La Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (FEDME) recomienda vivamente que las jornadas de senderismo se desarrollen en los diferentes senderos homologados por parte de las federaciones territoriales y autonómicas habilitadas para ello. La FEDME reconoce tres tipos de senderos homologados:

  • GR: trayectos que pueden completarse por etapas o secciones.
  • PR: trayectos a realizar completos a lo largo de una jornada.
  • SL: aquellos de desarrollo muy corto, que pueden realizarse de manera sencilla y en muy poco tiempo por cualquier grupo o persona, independientemente de su edad o condición física.

La fiebre del trekkingVentajas del trekking

Al hilo de esto último, podemos decir que la gran ventaja del senderismo o trekking es la posibilidad de adaptar sus exigencias a las condiciones físicas, edad o experiencia de aquellos que lo practican. En este sentido, estamos ante un deporte progresivo que permite al practicante ir incrementando la longitud, exigencia o dificultad de las rutas en función de sus necesidades o del tiempo que lleva haciendo este deporte.

Además, puede practicarse por toda la familia en casi cualquier época del año. Asimismo, proporciona la posibilidad de integrar deporte, salud, ocio, cultura y turismo en una única actividad.

Equipo básico del senderista

Para comenzar a practicar el senderismo es necesario que el neófito lleve consigo una serie de cosas innegociables:

  • Móvil para permanecer localizable en todo momento.
  • Botiquín sencillo (tijeras, gasas, desinfectante, analgésicos, crema para el sol).
  • Comida (te recomendamos las barritas energéticas, los frutos secos con miel y el chocolate, por su gran aporte energético y poco espacio necesario).
  • Mechero.
  • Brújula.
  • Cantimplora de 1 litro.
  • Cortavientos.
  • Pantalones impermeables.
  • Navaja de supervivencia.
  • Polainas con rejillas de ventilación.
  • Bastón de diferentes tramos (en función de la dificultad de la ruta o del estado físico del practicante).
  • Calzado: imprescindible que sea de suela rígida, con buen dibujo para evitar resbalones y que sujete de manera firme los talones (mientras permite una buena transpiración).

En diferentes establecimientos especializados (caso de la tienda Campingsport) se puede adquirir de manera cómoda todos estos productos. Parece una gran cantidad de artículos, pero por poco dinero puede equiparse uno de manera suficiente. Y es que, a la hora de salir a la naturaleza, más vale que nos sobre equipo por no precisar utilizarlo, que no tenerlo cuando más falta nos hace.