La diabetes y los riesgos coronarios

stent.jpgEl 30 por ciento de los pacientes que se someten a operaciones de angioplastía para desobstruir las arterias coronorias padece de diabetes, reveló hoy un informe presentado en el XIII Congreso de la Sociedad Latinoamericana de Cardiología Intervencionista (SOLACI).

Durante la última jornada del Congreso, que deliberó en la Argentina y es considerado uno de los más importantes de América en el área de cardiología, fue presentado un stent para diabéticos que se coloca durante la angioplastía y libera una droga para evitar problemas cardíacos.

El stent es una pequeña estructura tubular metálica expandible que sostiene a la pared del vaso cardíaco y se le coloca al paciente por vía percutánea, a través de un catéter, cuando hay que desobstruir una arteria para recuperar el flujo de sangre.

La enfermedad coronaria es la complicación más común en los diabéticos y de acuerdo a los datos médicos aportados durante la presentación del stent denominado taxus.

Jorge Beraldi, integrante del Instituto Cardiovascular Buenos Aires (ICBA), destacó que «los resultados de los estudios realizados a nivel mundial con pacientes diabéticos con enfermedad cardíaca señalan diversos avances en desobstrucción de vasos».

Beraldi precisó que «aproximadamente el 50% de los pacientes diabéticos a los que se les realizó angioplastia y se les aplicó stent con la droga paclitaxel, que contribuye a que el vaso no vuelva a obstruirse, redujeron sensiblemente los índices de restenosis y de eventos cardiovasculares adversos mayores«.

El cardiólogo destacó que «los estudios tecnológicos sobre uso de stent en pacientes diabéticos demostraron una significativa mejora en la calidad de vida, bajando el riesgo cardíaco». La diabetes es un trastorno en el que los valores sanguíneos de glucosa (un azúcar simple) son anormalmente altos.

La insulina, una hormona producida por el páncreas, es la principal sustancia responsable del mantenimiento de los valores adecuados de azúcar en la sangre y la diabetes se manifiesta cuando el organismo no la produce en cantidad suficiente.

La enfermedad arterial coronaria es la causa de muerte más usual entre los pacientes diabéticos y se distingue porque aparecen depósitos grasos o placas en las arterias coronarias, que progresivamente las estrechan y perjudican el normal flujo sanguíneo hacia el corazón, lo que provoca ataques cardíacos.

Los procedimientos de revascularización coronaria son más difíciles de realizar en pacientes diabéticos dado que generalmente presentan placas más extensas que pueden alojarse en vasos coronarios pequeños a los que resulta más difícil acceder.

El estudio taxus presentado en el SOLACI, que incluyó la participación de 814 pacientes diabéticos, reflejó que a los nueve meses de colocado el stent con droga, se observó el 59% menos de revascularización de la lesión tratada.

En tanto, se informó que entre los pacientes tratados con ese procedimiento hubo una reducción en el 41% en los índices de eventos cardiovasculares adversos mayores como ataques cardíacos e infartos.